O tal vez no

No sé si es molestia lo que siento aquí en mi pecho,
pero se apodera de mi,
desde que me enteré lo que piensas esta aquí y no se quiere ir
o tal vez no lo deseo.
Es más fuerte que mis deseos y no lo puedo controlar
o tal vez no lo quiero;
la cólera aumenta y solo deseo desfogarla contigo
decirte tantas cosas a la cara, decírtelas a la cara.

Cierro los ojos intentando calmarme,
respiro, fuerte pero respiro, hondo pero respiro,
es pesado lo que siento, lo que llevo, lo que cargo, lo que arrastro.
Te odio maldita sea te odio, no debería sentirlo pero te odio
no debería decirlo pero te odio, realmente te odio,
maldita sea me odio.

Dolor de cabeza, vienes a apoderarte a tratar de serenarme
crees que eso pueda conmigo?
Te odio y sabes por qué?
porque te amo, todavía TE AMO.
En el fondo lo hago.

Podría pensarse que eso es lo peor de todo
no, no es así
yo no tengo porque enojarme si no me buscas
al fin y al cabo fue la manera de buscarnos la que siempre nos definió.

No sé si eres tú realmente
o son tus amistades quienes te guían,
el punto es que al no hacerlo
me doy cuenta del verdadero sentimiento,
tan distinto al que tantas veces repetías.

Recuerdo tu cuerpo, a solas
las caricias de muchos encuentros,
los besos que siempre creí eternos
y me duele, me destruye por dentro
y lloro pero esta vez no en silencio ni para mis adentros,
lloro porque espero que cada lágrima se lleve aunque sea poco a poco
cada uno de tus recuerdos.

Tal vez allí

Tal vez allí en el cielo te vuelva a ver
no sé si a ese lugar pertenecemos
pero sé que ahí lo lograremos.
No tengo idea que haremos ni sé que camino tomaremos,
decidí ser día a pesar que lo nuestro siempre fue noche,
no, ya no sincronizabamos y lo lamento.

A veces me dan ganas de encontrarte, noches como esta
donde prefiero permanecer despierta,
dime que tú también andas así;
mienteme y dejame creer que aún te robo el sueño
déjame eso al menos,
después de todo con un beso siempre supiste robarme el aliento.

Un día en tu vida, regalame ese instante aunque sea en teoría
y sin que acabes de decir mi nombre
estaré atrapando en tu mejilla la lágrima derramada,
abre tus alas y volemos allí donde pertenecemos,
sueño eterno, sé que al menos eso nos debemos.
Siempre lo sabremos.

Recuerdos

Ya no planeo decirte más cosas
no las dije en su momento porque hacerlas ahora,
la canción que me acompaña esta noche me llena de tus recuerdos
momentos aquellos donde tus besos eran lo primero
y ese tal vez fue nuestro problema,
tú siempre fuiste prioridad por sobre lo nuestro.
No te culpo, no me senté a redactar esto para culparte,
no tengo idea de cual es el sentido de este escrito;
te recuerdo ¡Diablos! Te recuerdo,
pero ya no me dueles tanto
al menos eso creo, eso creo... tu recuerdo.

Nos habiamos amado tanto

No sé exactamente que sucedió, ni como pasó
el punto es que volviste a mi mente inesperadamente,

así como la lluvia que veo caer por la ventana de mi cuarto.

La lluvia, debe ser esta la que te trajo de nuevo.
Caminaba con tranquilidad mientras las gotas
empezaron a caer en mi rostro,
no sé si eran tus lágrimas pero sí que llevaban tu sabor.
Cuantas veces besé tus ojos mientras llorabas entre mis brazos,
cuantas veces en silencio nos fuimos amando.

Echada y a punto de llamarte me encuentro en mi cama,
no sé si eso es realmente lo que quiero
pero sé que en estos momentos tu sentimiento lo llevo adentro,
aqui adentro donde por tantos años viviste, creciste... moriste.

La lluvia, no hay duda que esta te trajo de nuevo.
Tu mirada mientras yo decía cualquier tontería y me sonreias;
eras sol cuando reias.
Caminabamos, así ibamos tu y yo, sin un camino fijo
ni siquiera un destino,
tan solo caminabamos porque de esa forma nos amábamos.

Aún deseo saber de ti y que será de tu vida,
te extaño lo admito, pero no sé si es a tus recuerdos
o es que deseo nuevos momentos;
temo buscarte y luego arrepentirme,
este juego de separarnos también consiste en que yo me haga a un lado.

Creo que para ser una tarde joven
cerraré mis ojos tratando de sentirte a mi lado,
lo recuerdo... aquellos cálidos besos en dias de veranos;
cierro mis ojos y por un momento déjame intentarlo de nuevo,
a ver si en sueños cumplimos nuestras promesas,
al menos la de andar siempre tú y yo de la mano.

Lo que somos

...Y somos románticos porque vivimos del recuerdo