jueves, 29 de abril de 2010

Te diré



Y me quedé con la sensación de sorpresa,
con la ilusión ante aquel sorpresivo beso tuyo
y la desilusión sellada con el abrir y cerrar de tus labios.

¿y quien fui? ¿y quien fui para ti?
Nadie, nadie
una más del montón,
aquella triste chiquilla
que se quedó vacía y lloró ante tantas mentiras.

Michael Mann - Cazador de Hombres

Después de leer la sinopsis de Cazador de Hombres, me sentí más que animada por verla, no solo por haber sido escrita y dirigida por Michael Mann, autor de obras tan recomendables como Fuego contra Fuego, Colateral y El Informante, sino por otra razón -la más importante tal vez- que es mi atracción hacia toda historia en la que aparezca Hannibal Lecter, aunque a veces haya tenido que pagar caro mi fascinación (Hannibal: Rising).


Basada en la segunda novela de Thomas Harris, “El Dragón Rojo”, presenta por primera vez al asesino en serie Hannibal Lecter (Lecktor en la película), sin embargo, se concentra en los personajes Will Graham y Francis Dolarhyde. Graham es sacado del retiro por el FBI para ayudar a rastrear a un asesino en serie conocido como Tooth Fairy (Hada de los dientes) ya que mordía a sus víctimas y su dentadura resultaba extraña. Graham se retiró después de casi ser asesinado por Hannibal Lecter, quien, subsecuentemente, fue capturado en el proceso. Graham busca ayuda de Lecter para atrapar al asesino. Sin embargo, descubre que Lecter lo está manipulando a él y al hombre que está tratando de aprehender.



Michael Mann nos trasmite a través de la música, los colores y la voz en off de Will Graham, aquellos límites tan imperceptibles entre la cordura y la psicopatía que habitan en la mente de un hombre, el perturbado mundo que existe tanto en el ególatra Dr. Lecktor, en el depravado asesino serial el cual se investiga o del atormentado investigador policial. Debo ser honesta y afirmar que esperaba más en el papel de Francis Dolarhyde, asesino en serie, traumatizado por los horrores vividos durante su infancia. La relación de éste y Reba se deja de lado en la película resultando por momentos pobre e inconexa.

Punto aparte para hablar del Doctor Lecktor. Lo primero que sorprende y atrae es su conocimiento, su inteligencia, pero más que eso es su dominio del saber. Se jacta de tener “buen gusto”, además de ser cortés y educado. Brian Cox es espectacular en el papel, tanto que tenía previsto el rodaje de El silencio de los inocentes, sin embargo, por cosas del destino, el papel del psiquiatra caníbal cayó en manos de Anthony Hopkins, un grande que supo hacer suyo el papel, del cual muchos creemos (me incluyo) es el mejor.




En resumen, una muy buena película, llena de una atmósfera perturbadora, tensa, con excelente narración. Una película que no hay que incluirla en la saga de Hannibal Lecter porque, de por sí, es ya toda un historia.

Stop Making Sense

Cuando me enteré que el director de las aclamadas Filadelfia y El Silencio de los Inocentes, Jonathan Demme, había dirigido el documental Stop Making Sense, me dije que tenía que verla. Exhibiendo su melomanía, Demme rodó este documental basado en el grupo norteamericano Talking Heads, una de las bandas más representativas del rock new wave.




Filmado en el teatro Pantages de Hollywood, Stop Making Sense recoge una serie de conciertos realizados en diciembre de 1983. Bastaron tres noches y siete cámaras para convertirlo en uno de los directores de cine musical más interesantes de todos los tiempos. Claro está que el resultado final no es solo mérito suyo. La genialidad de David Byrne (voz principal y guitarra) para trasmitir el estilo y elegancia de la banda se va sintiendo al transcurrir las canciones.

Desde el inicio del filme se hace notoria la innovación que Demme tiene preparada: la cámara siguiendo los pies de Byrne, quien guitarra en mano y radio cassette en el piso, ofrece una magistral ejecución de “Psycho Killer”. Al pasar las canciones los demás integrantes de la banda van apareciendo en el escenario hasta completarse para dar vida a la famosísima e impecable “Burning Down the House”. Si bien la canción en sí es estupenda, en el concierto toma otra dimensión. La percusión es realmente asombrosa, Tina Weymouth con el sintetizador también lo es, la batería es potente y Byrne luce con una vitalidad que parece inagotable; simplemente dan ganas de bailar, saltar, cantar, gritar a todo pulmón: ¡Burning down the house! Demme se encargo de transportarme a ese momento. Con su intencional desaparición del público y centrándose en la banda, uno se vuelve un miembro más del grupo.

Mención aparte es “Once in a Lifetime”, una de sus primeras canciones con el poder que tendrían los videos musicales durante los años 80. Sensacional de principio a fin y donde Byrne puede lucirse pues toda la canción gira en torno a él. Una gran cantidad de tomas largas y fijas ayudan también a un mayor enfoque en el grupo y a resaltar sus virtudes.



“Girlfriend is better” es otra canción destacable en el documental, los ondulantes movimientos de Byrne, el acompañamiento de una banda incansable y el efecto de las sombras de los músicos en el escenario –mérito de Demme– hacen que uno simplemente disfrute la canción y se pierda en esas sombras que cobran vida en el concierto. Tengo en mi mente grabada los juegos de luces, la gente divirtiéndose y a dos genios que hicieron de ese documental algo inolvidable.

martes, 27 de abril de 2010

Armin Van Buuren - Love you more

Aún recuerdo cuando hace un par de años un amigo me hizo escuchar a Armin Van Buuren, un Dj de Paises Bajos que por ese tiempo habia sido elegido por primera vez como el mejor dj del mundo por la prestigiosa revista Dj Magazine, superando incluso a otros DJ's de talla mundial como Tiësto y Paul Van Dyk(dos de mis favoritos).




Con casi 15 años de trayectoria el 3 veces consecutivas mejor dj del mundo(2007, 2008, 2009) cuenta con éxitos como el sencillo Love you more original de Racoon . Siempre para mí, es un viaje oirlo...y bailarlo.



Love you more
Clouds above go sailing by
I found my meaning in this life
clear white is flying in my eyes,
underneath a blue, blue sky
The waves come rolling in with the tide.
I've been away too long
and everyday I missed you more.
You look like you did before
only prettier.
Everyday I love you more.

All the people rushing by, by, by
looking for meaning in this life
so used up, and blinded by lies,
They're underneath the blue, blue sky
the way they seldom seem to smile
I don't know why.

'Cause I've been away too long
and everyday I missed you more.
You look like you did before,
only prettier.
Everyday I love you more.
I love you more,
everday I love you more,
and more.

Cause I've been away too long
and everyday I missed you more.
You look like you did before,
only prettier.
And everyday I missed you more,
and more and more and more and more.
I've been away too long
and everyday I missed you more
oh you look like you did before
only prettier
everyday I love you more.


Te amo más
Las nubes que me cubren van navegando
Encuentro mi sentido en esta vida
un blanco claro está volando en mis ojos
bajo un azul, cielo azul
Las olas vienen enrollándose con la marea
He estado fuera demasiado tiempo
y cada día te eché más de menos
Tú estás igual que siempre
sólo que todavía más preciosa
Cada día te quiero más

Toda la gente va apresurada
buscando el significado de sus vidas
tan usadas, tan cegadas por mentiras
están bajo el azul, cielo azul
el camino que ellos mismos parecían sonreír
y no sé porqué

Porque he estado fuera demasiado tiempo
y cada día te eché más de menos
Tú estás igual que siempre
sólo que todavía más preciosa
Cada día te quiero más
Te quiero más
Cada día te quiero más,
y más.

Porque he estado fuera demasiado tiempo
y cada día te echaba más de menos
tú estás igual que siempre
sólo que todavía más bonita
y cada día te echaba más de menos
y más, y más, y más y más
He estado fuera demasiado tiempo
y cada día te echaba más de menos
oh estás igual que siempre
sólo que todavía más preciosa
Cada día te quiero más

viernes, 23 de abril de 2010

Cuando más te extraño

En noches como esta son cuando más deseo abrazarte,
cuando el frío me produce insomnio
y este me trae a tu rostro de recuerdo.
En noches como ésta desearía que fuera más temprano
para dar un paseo y ver si así me entretengo
y borro por un momento tus besos.




Antes de irte creí que no lo harías
que algo te detendría
pero sigo sentada en esta silla
desde aquel día, desde ese día.

La oscuridad de la noche de por si me desanima;
luces que alumbran el cuarto
palabras que escribo en mi diario
canciones que escucho en la radio,
debí decir algo para detenerte, no
ya no tiene sentido que lo piense.

En tu foto me detengo por largo tiempo,
rostro que echo de menos de cuando en cuando
y no me animo a buscarte para disculparme
nunca me animo cuando te pienso,
nunca en noches como esta.

sábado, 3 de abril de 2010

En noches como ésta

Y ¿Qué pasa cuando medito sobre nosotros
y en como cambiaste mi manera de vivir?
Siempre me gustó la noche para pensar,
el frío en mi mejilla sentir
y los latidos en mi muñeca mirar,
sí, siempre me gustó caminar con audífonos
escuchando lo que quisiera escuchar.




Camino y me alejo, me alejo, siempre es mejor eso
sino como volver a casa,
como volver a casa si no me alejo.
Voy andando por parques, edificios y fiestas
voy andando por medio de la ciudad
meditando sobre nosotros y en como
cambiaste mi manera de pensar.

Alegrías y sonrisas veo al pasear
y me detengo en alguna banca o me pongo a bailar o a saltar
todo depende de donde decida reposar
y la noche se va haciendo más oscura y profunda
la noche va perdiendo color a cierta hora
y yo sonrío por fin sonrío porque te encuentro
y me dejo llevar sin meditar
cierro mis ojos para abrirlos a tu mirar.