Mientras vuelvo a casa te imagino manejando
luces de noche en la ciudad
la distancia se incrementa
cada instante un kilómetro nos separa
y el ruido junto a la contaminación de Lima me rodea y me recuerda
que anhelo el día en que tomes mi mano
sin importar lo que digan
tierna mirada la tuya
hay un fuego dentro de mi
causado por el grosor de tus labios
y así se da el inicio de mi vicio
kilómetros delante que me llevan a casa,
pero mi cariño viaja, viaja, viaja
allá donde estás,
un punto que no nos pertenece
manos blancas se entrelazan
el silencio es buen compañero
mientras sin ser tuya y tú, mía,
nos vamos definiendo,
luces de noche que iluminan,
kilómetros innecesarios,
¿No sería genial el poder tomar tu mano?
No hay comentarios.:
Publicar un comentario