Me es tan difícil plasmar lo que siento
lo que tengo y lo que quiero.
Me es tan incómodo persistir así
viviendo una mentira
una felicidad ficticia
un deseo profundo no satisfecho
un amor que con el pasar del tiempo se atenuó.
Voy alargando una despedida inminente
y me detiene siempre la duda,
la espera se hace infinita
y la rutina continua en su labor
de alejarnos,
de aflorar los defectos y
perder los deseos.
Caricias desgastadas acompañan nuestros encuentros
con las típicas discuciones que ya sabemos ocurrirán.
En qué momento dejamos de intentarlo y nos dio igual continuar,
en qué momento decidiste postergar los detalles para después
y me fui alejando en silencio
en qué momento, en qué momento...
2 comentarios:
"Caricias desgastadas acompañan nuestros encuentros
con las típicas discuciones que ya sabemos ocurrirán"
Eso es tan cierto a veces cuando se llegó o se dirige todo a un final, por mas que se trate de alargar algo dificil...
Me gustó mucho
saludos
andrés
A veces cuando sabemos que algo ya no funciona, y lo que ya pasó antes lo ratifica, es mejor terminarlo.
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