Escucho que el teléfono suena mientras me quedo sentada en la cama,
no me atrevo, no, no me atrevo a contestar,
no quiero escuchar una voz que no sea la tuya.
Camino mientras voy dando vueltas en mi mente a un asunto,
podría decirse que mis problemas tienen nombre y apellido pero eso de nada me serviría,
cada día la distancia entre nosotros aumenta en minutos, en horas,
ni siquiera cuando apenas te conocía,
ni siquiera cuando me eras desconocida.
Esta vez, me toca aceptar decisiones que ya no vienen al caso recordar,
palabras que debo en mi guardar.
La soledad se hace presente cuando nadie me rodea,
pero perfora el alma cuando decido recorrer la calle,
basta un ambiente rodeado de personas que aparentan felicidad con un beso,
para producirme un vacío absoluto,
no, así no era lo nuestro, ni en intensidad ni en sinceridad,
era algo más, lo sabías? lo recuerdas? nos recuerdas?
Aqui mis lágrimas ya no tienen cabida,
basta de llorar las cosas... eso intento, me repito,
es mi forma, mi modo de sentir lo que te moldea en mi mente,
recorro tu piel mientras voy correspondiendo tu sonrisa para luego adentrarnos en un beso,
en un mismo movimiento,
en un mismo latido,
en un mismo sentir
y mi alma se hace tuya mientras elevas un grito respirando aceleradamente,
hasta que los cuerpos estorben,
sí, aún lo recuerdo,
y todo el tiempo te pienso.
no me atrevo, no, no me atrevo a contestar,
no quiero escuchar una voz que no sea la tuya.
Camino mientras voy dando vueltas en mi mente a un asunto,
podría decirse que mis problemas tienen nombre y apellido pero eso de nada me serviría,
cada día la distancia entre nosotros aumenta en minutos, en horas,
ni siquiera cuando apenas te conocía,
ni siquiera cuando me eras desconocida.
Esta vez, me toca aceptar decisiones que ya no vienen al caso recordar,
palabras que debo en mi guardar.
La soledad se hace presente cuando nadie me rodea,
pero perfora el alma cuando decido recorrer la calle,
basta un ambiente rodeado de personas que aparentan felicidad con un beso,
para producirme un vacío absoluto,
no, así no era lo nuestro, ni en intensidad ni en sinceridad,
era algo más, lo sabías? lo recuerdas? nos recuerdas?
Aqui mis lágrimas ya no tienen cabida,
basta de llorar las cosas... eso intento, me repito,
es mi forma, mi modo de sentir lo que te moldea en mi mente,
recorro tu piel mientras voy correspondiendo tu sonrisa para luego adentrarnos en un beso,
en un mismo movimiento,
en un mismo latido,
en un mismo sentir
y mi alma se hace tuya mientras elevas un grito respirando aceleradamente,
hasta que los cuerpos estorben,
sí, aún lo recuerdo,
y todo el tiempo te pienso.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario