jueves, 12 de febrero de 2009
Perdoname en tus rezos
Tan solo deseo oir tu voz
y saborear tus labios
cerrar tus ojos cariñosamente
para luego acurrucarme en ti.
Lo sabes no?,
no hay más que decir
esto termina aquí,
adios sentimentalismo
y marcha atrás,
dramatismo afuera
o llevalo contigo a ver si esta noche
consigo dormir.
Mi corazón te busca
y mi alma cómplice,
no te consigo olvidar.
La lluvia moja mi ventana
empapa nuestros corazones
y sigo aquí,
sentada en mi cuarto
sentada en nuestra cama
sentada y arropada
sentada siendo nada.
Presiento que no dormiré este día
la noche ya se avecina
y sigo aquí escondia
refugiada en mi miedo
enredada entre mis cabellos,
anhelando verte en mis sueños
y que algún día
me perdones en tus rezos.
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